domingo, 10 de junio de 2012


La potomanía, un trastorno desconocido


La Potomanía o polidipsia psicogénica es el deseo de beber grandes cantidades de líquidos, por ejemplo, el agua, (polidipsia) como resultado de una enfermedad mental.
Sus consecuencias pueden ser dramáticas y fatales debido a que si el consumo diario de líquidos supera los cuatro litros el cuerpo humano, usando sus riñones, no podrá procesarlos, dando origen concreto al óbito (fallecimiento) por intoxicación con agua o hiperhidratación (Water intoxication en inglés), que se ve agravada si ese consumo se realiza en un corto intervalo de tiempo.
No debe confundirse con la dipsomanía, que es el resultado de beber excesivamente, pero está más relacionado con tóxicos y líquidos de rápida ingesta, generalmente asociados al alcohol.
Algunos individuos podrían tener comportamientos potomaníacos que generalmente son el resultado de desórdenes orgánicos u otras patologías hormonales como la diabetes insípida.
La potomanía no tiene causas orgánicas. Es el resultado de problemas psiquiátricos.
El tratamiento de la potomanía -o polidipsia psicogénica- sin base orgánica es la psicoterapia o medicamentos psicotrópicos.
En algunos casos, el deseo de una ingesta sobreexcedida de líquido, se explica simplemente por una falta de diversidad de líquidos.
Beber demasiada agua puede convertirse en un problema para la salud

Algunas personas no tienen capacidad para controlar el agua que toman, y lo hacen de manera exagerada. Este consumo excesivo se denomina potomanía. Se trata de un trastorno que consiste en un deseo frecuente de beber gran cantidad de líquido, de manera compulsiva, que se acompaña de una agradable sensación de placer, aunque puede tener consecuencias negativas para la salud.

 
El agua es el componente más abundante del cuerpo humano: representa más de la mitad del peso corporal. Esto significa que una persona que pesa 70 kilogramos tiene aproximadamente unos 35-40 litros de agua distribuidos por todo su cuerpo. Para conseguir mantener en equilibrio la cantidad de agua que necesita el organismo, una persona sana necesita alrededor de dos litros y medio de agua al día, que obtiene de tres fuentes: del líquido que ingiere (alrededor de 1.200 ml), de los alimentos que consume (aproximadamente 1.000 ml) y del que produce dentro del organismo como consecuencia del metabolismo, que equivale a cerca de 350 mililitros. Las frutas, las verduras y las hortalizas son los alimentos que más agua contienen.

Desequilibrio psiquiátrico

El consumo excesivo de agua puede ser síntoma de un desequilibrio psiquiátrico, ya que tiene aspectos en común con otros trastornos del control de los impulsos. Se trata de un trastorno relativamente desconocido que consiste en un deseo frecuente de beber gran cantidad de líquido, de manera compulsiva y sin sentir en especial sed, que se acompaña al ser satisfecho de una sensación placentera.
Beber siete o más litros de agua al día se convierte en un problema que precisa atención especializada
Cuando una persona es consciente de que bebe demasiada agua, alrededor de siete o más litros al día, debe acudir al especialista en endocrinología con el fin de descartar cualquier trastorno hormonal u otra patología que afecte al área del hipotálamo, lugar donde se encuentra el centro que regula la sed.
El hecho de beber cantidades exageradas de agua u otros líquidos no suele causar hiperhidratación, siempre que la hipófisis, los riñones y el corazón funcionen con normalidad, ya que el organismo elimina el exceso. No obstante, y como consecuencia de episodios repetidos y mantenidos de potomanía, se puede alterar el buen funcionamiento de los riñones, la composición de la sangre y el equilibrio de fluidos y electrolitos dentro del organismo.
El exceso de líquidos puede ocasionar que los componentes de la sangre se diluyan y se produzca un desequilibrio en la concentración de electrolitos. La hiponatremia es una consecuencia grave que puede aparecer en caso de potomanía y consiste en que el organismo concentra una cantidad muy baja de sodio en la sangre (inferior a 120 mEq/l). La hiponatremia grave impide el funcionamiento normal del cerebro, los músculos, los órganos y el metabolismo. El resultado puede provocar nauseas, cefaleas, letargia, convulsiones y coma.

El equilibrio hídrico

El agua, en el organismo, se encuentra distribuida en dos compartimentos: el intracelular y el extracelular. El primero representa del 50% al 60% (55% de promedio) del agua corporal total en el adulto sano. El agua extracelular es la parte acuosa de los líquidos extracelulares, el líquido intersticial y el plasma, y también forma parte de los sólidos extracelulares (dermis, colágeno, tendones, esqueleto, entre otros). El agua intracelular ocupa alrededor del 20% del total, del cual el 8% aproximadamente se encuentra en la sangre. El volumen de agua de la sangre, relativamente pequeño, resulta fundamental para el correcto funcionamiento del cuerpo y debe mantenerse constante.
En condiciones normales de salud, la cantidad de agua que necesita el organismo está condicionada por la necesidad de que los líquidos corporales tengan el volumen y la concentración osmótica precisos para asegurar las funciones biológicas.
El agua se absorbe en el organismo en distintos tramos del tubo digestivo por complejos mecanismos de absorción, y los riñones se encargan de eliminar el exceso como parte de la orina. Estos órganos pueden excretar varios litros de orina diarios, o bien conservar el agua eliminando menos de medio litro cada día. La concentración de agua presente en el organismo está ligada a la cantidad de electrólitos. Así, el nivel de sodio en la sangre es un buen indicador del volumen de agua que existe en el organismo. El cuerpo trata de mantener el nivel de agua total y, por tanto, una concentración constante de electrolitos, entre ellos el sodio. Cuando éste es elevado, el cuerpo retiene agua para diluir el exceso de sodio, aumentando la sensación de sed y produciendo menos orina. Por el contrario, cuando la concentración de sodio desciende demasiado, los riñones excretan más agua para restaurar el equilibrio.
La concentración de agua está equilibrada cuando se compensan las pérdidas diarias y, para ello, las personas sanas, con un funcionamiento normal de los riñones y que no transpiren en exceso, deben beber al menos un litro y medio de líquido cada día. De esta manera, se consigue mantener en equilibrio el volumen sanguíneo y la concentración de las sales minerales disueltas (electrólitos) en la sangre. El sudor, una alimentación muy salada, los vómitos y las diarreas duraderas o infecciones diversas acompañadas de fiebre aumentan las necesidades de ingerir agua.

TRATAMIENTO

El tratamiento de la potomanía depende de la causa de base, aunque en general se debe restringir el consumo de líquidos a un litro y medio diario. En ocasiones, los médicos prescriben un diurético para aumentar la excreción de agua por parte de los riñones, aumentando el aporte de sodio en poco líquido.
Episodios de potomanía se relacionan con aquellas quienes tratan de bajar de peso por medio de un consumo exagerado de agua, con el que pretenden "engañar al estómago" al llenarlo con agua en lugar de hacerlo con comida. Se han dado también casos en atletas de alto rendimiento que consumen muchos más litros de agua de los que su organismo precisa, ante la preocupación que tienen de prevenir la deshidratación. En estas situaciones conviene estar alerta para descartar un trastorno por falta de control a la hora de beber agua.

domingo, 3 de junio de 2012

La demagogia

Llamamos demagogia  a la estrategia utilizada para conseguir poder político. Consiste en apelar a prejuicios, emociones, miedos y esperanzas del público para ganar apoyo popular, frecuentemente mediante el uso de la retórica y la propaganda.


Formas de demagogia

Falacias:
Argumentos que equivocan las relaciones lógicas entre elementos, o bien adoptan premisas evidentemente inaceptables. Para mayores detalles, ver falacia. Entre ellas se encuentran la falacia de causa falsa, el argumento circular, el argumento ad verecundiam, el argumento ad hominem, y la apelación a una autoridad irrelevante para el caso citado.

Omisiones:
Se presenta información incompleta, excluyendo posibles problemas, objeciones, dificultades, lo que resulta en la presentación de una realidad falseada, sin incurrir directamente en la mentira.

Redefinición del lenguaje (eufemismos por palabras tabú):
Mediante la eliminación progresiva o eliminación de las palabras que menoscaban su posición, intentar modificar o hacer desaparecer la forma de pensar que se opone a sus argumentos. Ej. crisis / periodo de ajuste.

Tácticas de despiste:
Consiste en desviar la discusión desde un punto delicado para el demagogo hacia algún tema que domine o donde presente alguna ventaja con respecto a su oponente o contrincante. No se responde directamente a las preguntas ni a los desafíos.

Estadística fuera de contexto:
Consiste en utilizar datos numéricos para apoyar una hipótesis o afirmación, pero que estando fuera de contexto no reflejan la realidad. Aquí también se cuenta el uso tendencioso de estadísticas, también conocido como demagogia numérica.



La canción hace referencia a la democracia representativa, criticando la demagogia de las campañas electorales, dando a entender que las elecciones son una mera farsa, ya que el bipartidismo y el voto útil hacen que las opciones minoritarias no puedan prosperar.



Huye de la monotonía...


En primer lugar, tenemos que definir el concepto de monotonía como la falta de variedad. En nuestras vidas, tiene un efecto devastador, ya que poco a poco vamos haciendo las cosas siempre igual, de forma rutinaria, haciendo nuestras vidas predecibles, eliminando de nuestras vidas las emociones, logrando que perdamos el interés en la familia, en la pareja, en los amigos, en el trabajo, incluso perder el interés en vivir.

Nuestra sociedad nos empuja a vivir en monotonía, pues muchas personas dejan de vivir plenamente, simplemente por el ¿qué dirán? y se condenan así a pasar una vida vacía, carente de emociones, llenas de tedio, aburrimientos y amarguras.

Solo hay una vida, por lo no la podemos desperdiciar en vivir así. Llenemos nuestras vidas de cambios, de trasformaciones, de aventuras, llenemos nuestras vidas de colores, de matices que nos hagan apreciar al máximo el que estemos vivos; dediquémonos a vivir la vida, a disfrutarla, dediquémonos a vivir libre de estigmas sociales y religiosos, dediquémonos a vivir. Ante todo, evita la monotonía:


Baila:

Diviértete:

Haz amigos:





Cuida de los tuyos:


Medita:


CARPE DIEM, COÑO!!